EQUILIBRIO YIN-YANG
Cuando
Todo pude ver con ojos de mujer, la vida viró y una nueva sensación, invadió mi
Corazón. Hoy no libro batallas ancestrales, de soldado embriagado por el éxito.
Hoy libro la más valiosa de mis batallas, la de darle a mi dama un hueco. Ella
me abraza, me susurra al oído. Ahora la sigo. La aventura hacia lo desconocido,
acaba de comenzar. Cierro los ojos y me dejo llevar a voluntad. Yo Creo.