La Oportunidad
Avancé, dando cuatro pasos,
fui,
despidiéndome del pasado,
pero no estabas allí,
me habías dejado
y por ello decidí,
que la vida
me había abandonado.
Estás ciego – te respondí.
Porque a tu tercer paso,
yo ya había llegado,
pero tú, cegado,
me ignoraste por completo.
No es posible – te dije.
Allí no había nadie.
No es cierto,
tú sabías que podías verme,
pero reconocerme,
significaba morir en tu lecho de muerte,
dejar de lamentarte,
tomar lo que siempre soñaste,
cambiar lo que creías incambiable,
no tener más excusas,
y por fin abrazarme.
¿Estás dispuesto…?
Si.
Pues en tres pasos nos vemos.
Joanna Escuder
Extracto del Anexo 3ª Etapa
del Camino del Ego al Logos -
Un Camino sin retorno,
del Libro Códice Cosmosóphico
de la Escuela de Temple Inanna
