Arcano nº13 - LA MUERTE

La Adaptación y la Fluidez de los procesos



Cavilando, caminé,
dando tumbos,
ya sin fe,
sabiendo que lo que fuera,
ya no es.
Lo acepté.
Cavilando, caminé,
hacia un rumbo que fijé,
sobre un camino que a lo sumo,
estaba cubierto de miel.
Fue una preciosa abeja,
la que me mostró el panal,
el lugar para colmarme
y después colmar.
En esa celdilla perfecta,
en larva me convertí,
y cuando supe que un nuevo néctar
me daría para vivir,
decidí abandonar la celda
y volver a salir.
Volé en busca de esa flor,
que cuando encerrado, intuí.
Ahí estaba ella,
quien abrió sus pétalos,
me mostró sus pistilos,
me embriagó de su perfume
y me abrazó en su halo.
Supe que sería mi madre,
la única que me devolvería a la vida,
tras aquella espera,
el tiempo en ese lado,
se había acabado.
Así que nací,
era muy hermoso,
tanto que todos
con inmenso amor,
me abrazaron.

Entonces sonreí.


Joanna Escuder
Extracto del Anexo 3ª Etapa 
del Camino del Ego al Logos - 
Un Camino sin retorno, 
del Libro Códice Cosmosóphico 
de la Escuela de Temple Inanna